El masaje con miel contribuye a la relajación y mejora de la circulación en las capas profundas de los tejidos, hidrata la piel y ayuda a expulsar sales y toxinas, lo que en general mejora la nutrición de la propia piel. Ayuda en la lucha contra la celulitis, rompiendo los depósitos acumulados en el tejido subcutáneo, contribuyendo así a superar las imperfecciones de la figura, consiguiendo elasticidad y tersura de la piel.
¿Qué es?
Las capas más profundas de la circulación de la piel mejoran significativamente con el masaje con miel, que también calienta y tonifica la piel. Además, ayuda a reducir el dolor al apoyar mejoras en la nutrición y la eliminación de desechos de la piel.
¿Como funciona?
La miel funciona como un humectante externo. En otras palabras, atrae agua y favorece su retención. Hidrata la piel y la suaviza cuando se agrega a una loción o aceite. También tiene una gran cantidad de vitaminas y minerales que la piel absorberá.
¿A qué se dirige?
También es vital considerar la dirección del masaje; todos los terapeutas de masaje debidamente educados siempre trabajan en la dirección del corazón, ayudando tanto al flujo sanguíneo natural del cuerpo como al aumento del flujo sanguíneo en todo el cuerpo.
Como el sistema linfático utiliza únicamente el propio movimiento del cuerpo para transportar la linfa por todo el cuerpo, el masaje ayuda al flujo de la linfa.
Los terapeutas de masaje capacitados ayudarán suavemente al tránsito del líquido linfático, lo que puede ayudar a eliminar las toxinas que se han acumulado y mejorar su sistema inmunológico.
¿Los beneficios de este tratamiento?
- Reducir el estrés y aumentar la relajación.
- Mejora la circulación, la energía y el estado de alerta.
- Disminución de la frecuencia cardíaca y la presión arterial.
- Mejora de la función inmunológica.
- circulación mejorada
- estimulación del sistema linfático
- tono de piel mejorado