Actuando sobre las terminaciones nerviosas situadas en los pies, esta técnica milenaria establece el equilibrio del cuerpo, cura la ansiedad y el estrés, facilita el sueño y consigue un efecto extraordinario en el funcionamiento de los órganos internos. De acuerdo con la simbiosis de los masajes (shiatsu, thai y reflex), esta técnica está, entre otras cosas, indicada para mujeres embarazadas, fatiga psicofísica, suelas planas y personas que padecen diversas enfermedades crónicas.
¿Qué es?
La diferencia clave entre la reflexología podal y el masaje podal es que la reflexología podal es un tratamiento de masaje basado en puntos de presión que se enfoca en puntos nerviosos específicos para sanar el cuerpo, mientras que el masaje podal es un masaje relajante que no va más allá de sentirse bien después efectos La mejor parte es que combinamos esos dos en uno, brindándole una experiencia holística única.
¿Como funciona?
Al reducir el estrés de manera eficiente, la reflexología generalmente tiene un efecto calmante. La reflexología se basa en la idea de que varias partes del pie representan varias funciones y sistemas corporales. Se cree que la aplicación de presión en el pie puede relajar y curar la parte del cuerpo que le corresponde.
¿A qué se dirige?
Los reflexólogos pueden usar una presión específica para tratar de restaurar el equilibrio del cuerpo si descubren tirantez, incomodidad o congestión durante la sesión en ciertos puntos desencadenantes. Al finalizar la sesión, el reflexólogo puede regresar y verificar si la incomodidad disminuyó.
¿Los beneficios de este tratamiento?
- Alivio del dolor menstrual y del embarazo.
- Efecto de calma.
- Optimización de las Funciones Nerviosas.
- Mejora en la Energía Mental.
- Aumento de la circulación sanguínea en su cuerpo.
- Desintoxicación.
- Aumento de los niveles de vitalidad y energía.
- Reducción de dolores de cabeza.